CLÁSICO DE
AVELLANEDA
El 19 de agosto de 2012
por la mañana Racing e Independiente disputaron un partido muy importante, en
el cual ganó el conjunto Racinguista por 2 tantos sobre 0 con goles de José
“Pepe” Sand.
El partido
comenzó a las once de la mañana, justo cuando el calor comenzaba a hacerse
llevadero. El equipo en el cual dirigía Luis Zubeldía, fue el primero en salir
al campo de juego con su espléndida camiseta de rayas celestes y blancas,
deseándose suerte entre ellos y señalando a sus hinchas que iban a dejar todo
en la cancha. Cuando salió el equipo de Luis, la cancha explotó con globos,
fuegos artificiales, papelitos, pirotecnias, etc. Cantando: “Racing mi buen
amigo esta campaña volveremos a estar contigo, te alentaremos de corazón esta
es tu hinchada que te quiere ver campeón”. Cuando cantamos esta canción el
Cilindro de Avellaneda se re puso y explotó. Luego siguieron con: “Muchachos
traigan vino juega la Acadé…”, Cómo nos gusta a todos los académicos esta
canción, creemos que es la mejor que tenemos.
Después de dos
minutos salió el conjunto de Américo Gallego en el cual los jugadores tenían su
camiseta tradicional roja. Nosotros los de Racing los puteábamos, escupíamos,
le tiramos de todo. Los de al lado mío, se notaba que los odiaban con toda su
alma al conjunto vestido de rojo, porque le decían de todo como: “Rojo te vas a
la B, la concha de tu madre, no te salva ni el gordo hijo de puta de Grondona,
amargos y pechos fríos de mierda”. En esta parte me empecé a morir de la risa
porque eran unos ancianos, los que mencionaban eso.
Lo que tiene
este clásico es que se siente de otra manera, es como celebrar un cumpleaños o
comer un asado en familia, se re disfruta.
Durante toda la
primera parte el equipo conducido por Zubeldía mantuvo el control del balón,
tocando de acá para allá con Camoranesi, Villar y Centurión, no le dieron
ninguna oportunidad de tirar a la puerta al arco del “Chino” Saja,
adelantándose a todas sus estrategias y con precisión mostrando que se querían
llevar este “derby”.
El equipo del
cual soy fanático ( Racing Club de Avellaneda) tuvo muchas chances de lograr el
marcador, uno de los goles del partido fue en el primer tiempo a los 28’ del
futbolista argentino nacido en Corrientes José “Pepe” Gustavo Sand, en donde
dejó sin reacción al arquero Hilario Navarro.
Como de
costumbre cuando hace un gol Racing la cancha explotó y parecía que se venía
abajo cuando saltábamos todos celebrando ese tanto del goleador.
El segundo gol
del Pepe fue en el segundo tiempo a los 28’, igual al primero, con una contra
del talentoso y veloz Ricky “Wachiturro” Centurión, en cual asistió dejándolo
al Correntino sólo con el portero, para que convirtiera su segundo tanto. Otra
vez pasó lo mismo que había ocurrido en el primer tiempo, el estadio reventó
como siempre, repitiendo sus clásicas canciones contra el Rojo: “Muchas copas
vos podrás tener no una banda como la "Acadé". Te vas a la B rojo puto”, “El que
no salta se va a la B”, entre otras.
Fue para mí el
primer y el mejor clásico de toda mi vida, lo disfruté desde que salió el
equipo hasta cuando me fui para mi casa. Lo mejor pasó después del encuentro,
porque empezamos a cargarlos y gastarlos a los contrarios.
Qué lindo
domingo nos diste Racing, ese pibe Centurión se parecía al correcaminos de los
Looney Tunes, jugó un clásico como se tiene que jugar con garra, se bancó las
patadas y aún no se achicó. Me encantó la jugada que hizo pasar de largo con un
amague y una bicicleta a Santana, dejándolo sin palabras, luego se la tiró
larga a Russo, el cual fue amonestado por cometer esa infracción.
Rodrigo Mercado
No hay comentarios:
Publicar un comentario